La casa se compone de dos módulos distintos, uno de un nivel y otro de dos niveles. El primer módulo alberga la sala, el comedor, la cocina, las áreas de servicio y un dormitorio. El segundo módulo está dedicado a los espacios privados, con tres dormitorios y una sala.

La estructura combina concreto reforzado con techos armados de madera y forrados de palma, integrando materiales locales para lograr una armoniosa conexión con el entorno.

Los ejes fundamentales del proyecto son la circulación de aire, el uso de materiales vernáculos y la simpleza de las formas. El diseño se centra en permitir una ventilación natural eficiente, utilizando materiales disponibles en la región para mantener la autenticidad y reducir el impacto ambiental. La simpleza de las formas arquitectónicas asegura funcionalidad y estética, ofreciendo un espacio habitable cómodo y moderno.